La mirada poética

La mirada poética es varias cosas que he ido descubriendo y sigo descubriendo a medida que prosigo en esta búsqueda que es encuentro.

Es sacar la basura afuera todos los días

Es ver desde el corazón y con el corazón

Es escuchar con el corazón abierto

Es ver lo que está aquí

Es una exploración contínua que va mostrando lo que soy, lo que es la realidad, más que lo que pienso o alguien pensó

Es saber que necesitamos de las otras personas para ser, y que esta apertura nos abre a una realidad unificada que es propiamente eterna

Es saber que el aprendizaje de ser no se detiene mientras estamos vivos y vivas

Es descubrir la unión de todos los tiempos, la unidad de memorias y presencias, experiencia, que se guarda en cada segundo, si es que aprendimos a mirar bien.

Y esto nos devuelve una sensación de pertenecimiento que disminuye la soledad, la exigencia excesiva, la presión descabida.

Surge entonces la meditación, el sentimiento de ser parte y estar bien, amparados y amparadas en un amor que nos acompaña desde el comienzo.

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