Excelente comienzo: reír

Reír es el mejor remedio. Una persona es un capítulo.

El capítulo de hoy empieza así. “La vida es amiga del arte, es la parte que el sol me enseñó.” ¿Para qué tanta seriedad?

¿No cierto? Yo creo que sí. No es necesario. Si me río todo va mejor. No es la risa del sarcasmo, para nada. Es más bien la otra. La carcajada sonora, que borra las tinieblas e ilumina.

¿Qué es lo que me provoca tristeza? ¿La ausencia de un ser querido? No puede estar ausente ya que está aquí. Ayer me entretuve leyendo algunos de mis libros. Mosaico, Libertatura, Folhas recolhidas.

Me hizo bien volver a sentir como es que yo era entonces. En 2003, en 2014, en 2017. Es una comedia. Me reía al recordar gente y situaciones de entonces.

Lo que pudo parecer dramático ahora me hace reír. No sé como es que hay gente que cree que la historia no se repite. Los mismos trucos.

Creen que uno no presta atención, pero yo presto atención a todo, siempre fui así. No se me escapaba nada. Releyendo esos escritos antigos me viene una sensación de contentamiento.

Se puede. Yo puedo. Se puede salir siempre de la situación más desafiadora. Y a veces el desafío es simplemente comprender. En vez de arremeter sin reflexión, parar, mirar, escuchar, ver.

Como aquellos letreros que había en el paso a nivel. Pare, mire, escuche. Cuidado con los trenes. Cada cosa que escribo trae una infinidad de evocaciones. El miedo no debe gobernar nuestros actos.

Mirando retrospectivamente, y aún en el pasado más reciente, veo que a pesar del miedo siempre seguí y sigo adelante. El miedo muchas veces son recuerdos fuera de lugar.

Los pongo en el estante respectivo y ya está. Ahora la casa está vacía. Muchas veces me quejo de no tener lugar. Ahora tengo todo el lugar. Veo los cuadros, los rostros familiares. Todo me toca aún más.

Los recuerdos de familiares que aquí estuvieron y están de otras maneras. Mis padres me han recibido en esta casa. Los encuentros virtuales me traen acogimiento. Apoyo. La vida va yendo así.

El canto de los teros a lo lejos. El sol subiendo sobre el horizonte. Nubes. ¡Cuántas nubes ya pasaron! Seguirán pasando. Y el sol brillando. Siempre brilla el sol. El aprendizaje del vivir es contínuo. Belleza.

Ese es el camino. Siempre hay una salida posible. Nunca estamos solos ni solas. Sacar el mayor bien del mayor mal. Generar algo bello. Así empieza la introducción a este día.

Deixe uma resposta