Desde este proyecto de prensa libre, saludamos la victoria del pueblo de Chile.
Enfatizando la importancia de que gobiernos volcados a la atención de las necesidades de la población como un todo, substituyan los regímenes ilegales e inconstitucionales, o de fachada pseudo-democrática.
Es imperioso que los derechos humanos, sociales y laborales, sean la brújula que oriente no sólo a la administración estatal, sino también al conjunto de la ciudadanía.
Basta de gobiernos genocidas, que exacerban la explotación de quienes trabajan, concentrando la renta y los privilegios en unas pocas manos.
Es necesario romper el aislamiento que establece fronteras artificiales, muros de odio. Caminar hacia la unidad de América Latina. Hacia la unidad de la humanidad, una y diversa. Plural y rica en su multidimensionalidad.
Estimular las inciativas que promueven el acercamiento entre los pueblos y las personas. Es posible vivir con justicia y paz. Es posible el amor. Es posible la solidaridad. No estamos hablando de sueños, sino de realidades cuya efectivación depende de trabajo continuo y colaborativo. ¡Al pueblo chileno, salud!