Vida consciente

La vida no es un hecho irrelevante. No es lo mismo vivir que morir. Desde temprano en mi vida, me di cuenta de que había gente alrededor, para quienes la vida no tenía demasiada importancia. Les daba lo mismo una cosa que otra. Para otros y otras, al contrario, estar vivo o viva tenía una significación especial.

Durante la pandemia, que coincidió aquí en Brasil con un régimen nazifascista, me sorprendió que había personas amigas, colegas, a quienes lo que estaba pasando no parecía tocarles demasiado. A mí, al contrario, ese tiempo de proximidad con la muerte, me revivió lo más precioso en mí.

El amor por la vida renació y sigue renaciendo como una floración continuada. La conciencia que yo tengo de este hecho, me aproxima íntimamente de cada instante. Todo tiene un valor incalculable. A medida que me sigo haciendo cada vez más consciente del valor de estar vivo, todo lo que hago se impregna de una cualidad especial. Intensidad.

Ternura. Una entrañable ternura. Una sensación sin igual, que me hace estar admirado todo el tiempo. El hecho de que yo esté de vuelta, después de larga ausencia –que no fue del todo tan ausente—le da un significado profundo al placer. La sensación de embelesamento que acompaña al disfrute de lo bello.

Saber que no soy perfecto, aceptarme, quererme bien. Saberme entero, todo. Reivindico todo mi ser, y sé que no estoy solo. Hay gente a quien escucho, que está en la misma tarea. Pude distinguir a quienes vivían o viven en el mundo del discurso, y que en la práctica actúan de manera totalmente desconexa.

Esto no lo digo por otro motivo que mi propia intención de ser entero. Presto atención a lo que escribo, a lo que vivo, a lo que siento, a lo que quiero. La totalidad es una realidad, y formo parte de ella, a mi manera.

Me fui haciendo consciente de esto a través del estudio y de la práctica. Nada enseña tanto como un día después de otro. Consciencia es saber de mí y saber del mundo. Es más que mera información. Es sentimiento preciso y precioso. Es una guía para el vivir.

Ilustración: Pinterest

Deixe uma resposta