El día había terminado más temprano. A veces pasa esto, que los días terminan antes de terminar propiamente. Lo supe mientras estaba en la sala de espera del médico. La televisión pasando la novela “Cobras y lagartos”. El movimiento de gente entrando y saliendo.
La recepcionista desdoblándose entre el atendimiento de las personas que llegaban, el teléfono, y los exámenes que eran realizados en la sala contigua al consultorio. Ahora ya es de noche. No hace mucho, el sol se fue hacia otro lugar. Y la vida sigue del lado de acá del crepúsculo.
Cuántas indagaciones en el día. Cuántas oraciones. Cuánta conversación con Dios. A la mañana, la espera en el Banco. ¡Tantos recuerdos! Miraba el verde de la mata de la universidad, y recordaba otros tiempos. ¡Cuánta vida condensada! Yendo y viniendo.
Las compras en el supermercadito del bairro. Las veredas como em espera. Y mi nuevo libro, como un gran eco de mí mismo que a cualquier momento me recibe. Es notable cómo me he ido pasando en limpio a lo largo de todos estos años de escribir. Hice el inventario de lo hecho en el día, y entonces supe: el día había terminado.

Doutor em sociologia (Universidade de São Paulo). Mestre em sociologia (IUPERJ). Licenciado em sociologia (Universidad Nacional de Cuyo, Mendoza, Argentina). Professor aposentado da UFPB. Terapeuta Comunitário Formador. Escritor. Membro do MISC-PB Movimento Integrado de Saúde Comunitária da Paraíba. Vários dos meus livros estão disponíveis on line gratuitamente: https://consciencia.net/mis-libros-on-line-meus-livros/