¿No será la vida un abrirse paso?

¿No será la vida un abrirse camino a través de desafíos? Esta mañana caminaba hacia la plaza de la lechuza, cuando me vino esta pregunta.
¿No será el vivir un abrirse paso? Un tratar de encontrar un lugar. Un hacerse uno a sí mismo, como dice el Pe. Comblin. La autopoiesis.
Las primeras horas del día tienen la virtud de permitirme un fluir en la hoja y en el mundo. La confianza es más grande.
Hay menos interferencia de todo ese caudal de instrucciones y miedos a que llamamos de educación.
Puedo ser yo mismo por unos instantes, y esto me orienta, dirige y da fuerzas para todo el resto del día.
Puedo vivir sin creencias negativas a respecto de mí mismo: las descarto. Yo no soy eso. Puedo confiar en mí mismo y en quienes me aman.
No necesito estar a la defensiva, como temiendo un ataque. Puedo ser yo mismo en medio de la gente.
Sé que hay un escenario oscuro sobrevolando el país y el mundo. Es lo que se proyecta desde las usinas de la maldad.
Pero yo soy luz, como dice Isaias 60:1-2. Esta profecía está dirigida a toda persona que trata de seguir los caminos de Dios.
 

Deixe uma resposta