Volviendo

Querría escribir alguna cosa. Cosas banales, triviales, si se quiere. Tal vez no tanto, pues se trata de cosas del corazón. Pensaba en cómo se había ido armando mi camino de vuelta. Vuelta a Mendoza. Vuelta a Argentina. Vuelta a mí mismo. Vuelta a mí mismo. De esto creo que se trata. También volveré a Joáo Pessoa. Volveré a Brasil y a la Paraíba.

Seguiré volviendo. De esto es lo que creo que se trata. Ayer me emocionó mucho todo esto. Ví cuánta gente querida, amigos y familiares, han puesto su granito de arena para que esto ocurriera y siga ocurriendo. Gente que se ha acercado con su corazón, con su propia historia de vida. Han ido contribuyendo para que se creara un espacio acogedor. De esto se trata la Terapia Comunitaria Integrativa.

La familia. Los amigos. La fe. Recordaba todas estas personas, esta sucesión de momentos, y me daba una emoción profunda en el pecho. Lloré. Lloré de alegría y de emoción. Sentí el piso bajo mis pies. Seguridad. Tranquilidad. La tierra. Sentí mi historia, continuada, florecida. Respiré hondo ayer y respiro hondo ahora.

Cómo se fue juntado el pasado y el presente. Se fue juntando el ayer y el ahora. Un pasado doloroso muchas veces, y unas pepitas de oro, unos hilos de luz, no sé cómo llamarlos. La alegría y la tristeza. Las lágrimas y la risa. Apuré el paso ayer, mientras andaba por las veredas. Apuré el paso y sentí una alegría profunda. Agradecimiento. Gracias. Gracias. Infinitamente gracias.

Deixe uma resposta