Libros no leídos. Cuadros no pintados. Libros no publicados. No sé si verdaderamente habría que hablar de la utilidad de lo inútil, o más bien de la utilidad de lo que todavía no es, de lo que podría ser, lo que está en proyecto, talvez en alguna especie de incubadora, en algún lugar donde las cosas están antes de venir a ser.

Los libros no leídos son o pueden ser una buena compañía. Un lugar posible por donde uno puede deslizarse para escapar de las exigencias de resultado y desempeño impuestas por el modo de ser del mundo actual.

Me alegra saber que en mi biblioteca están varios libros de Julio Cortázar, de Isabelle Ludovico, de Martha Medeiros, de Mario Vargas Llosa, de Lya Luft, de Ramón Pascual Muñoz Soler, que no he leído en absoluto, o de los cuales he leído solamente algunas páginas.

Esas pocas páginas leídas, y sobre todo esas páginas no leídas en absoluto pero que allí están, forman como un corredor vasto, ilimitado, hacia mundos que un día exploraré, o que quien sabe ya me estén diciendo cosas con su simple presencia.

Cuadros no pintados son como un remanso. Algunos de ellos están allí (pero donde, como, como dice Cortázar), podría decir que en el mismo lugar, en la misma pared donde los ví alguna vez. Me refiero en especial a esas hortensias y jazmines del cielo. Y también a un crisantemo blanco que está en algún lugar, no sé donde pero aquí, sí.

Y entonces los libros que no he publicado todavía, pero que siguen juntándose de a poco, en intervalos de días y días, en que alguna hoja viene a posarse como una mariposa, lentamente, unas al lado de las otras, o unas sobre las otras, formando un mosaico infinito, que se pierde de vista en todas las direcciones, y por donde camino y he caminado, caminaré.

Sé que un día me gustaría publicar alguno de esos libros que se vienen formando, pero talvez ese placer esté dado a mis herederos (qué presunción!). Una tarde gris y de lluvia como ésta, en que uno se ve cobijado por el tiempo que te envuelve con su manto, es un tiempo propicio para pensar en las cosas que nos sirven por no ser todavía, por ser potencialmente, o por no ser de modo alguno.

Rolando Lazarte

Doutor em sociologia (USP). Terapeuta Comunitário. Escritor. Membro do MISC-PB Movimento Integrado de Saúde Comunitária da Paraíba. Autor de “Max Weber: ciência e valores” (São Paulo: Cortez Editora, 2001. Publicado em espanhol pela Editora Homo Sapiens. Buenos Aires, 2005), Mosaico (João Pessoa: Editora da UFPB, 2003), Resurrección, (2009). Vários dos meus livros estão disponíveis on line gratuitamente: https://consciencia.net/mis-libros-on-line-meus-livros/