Arquivo da tag: Plenitud

Poema integrado

Poema integrado

Sentimiento de mí

Sentimiento de familia

Sentimiento de mundo

Placeres de la vida

Placer de vivir

Yo puedo enfrentar victoriosamente cualquier situación

Confíanza.

Ilustración: “El tejido del universo”

¿Por qué la poesía?

¿Por qué la poesía? Es lo que soy. Es lo que es.

Es donde puedo ser.

Lo demás, fuera de aquí

No necesito acatar ni atacar

Vuelvo a primer plano

Es donde puedo vivir y vivo

Así de simple.

Entonces no me presionen

No quieran que yo vaya a donde no quiero ir

No voy adonde no quiero ir

No hago lo que no quiero hacer

Así de simple

Ya las aves cantan esta mañana

Me encanta poder ser así y estar así.

No aprendí a detener guerras

Sino a sobrevivirles

Se basan en la mentira y el engano

El miedo y la duplicidad

La calumnia y la difamación

Nada que ver con lo mío

Lo mío es este venir en flores y colores

Es este ser con quienes están cerca y adentro

Es este saber que la belleza encanta y fascina

Es saber que la risa y el canto son lo que hay

Lo demás pasa y se va

Esto viene y se queda

Es lo que queda

Así de simple.

Tuve que negarme

En este mundo que niega

Aprendo a ser de nuevo

Como al principio

Y ahora estoy de nuevo aqui enterito.

Escribiendo

Escribiendo voy abriendo espacio

Voy viendo lo que hay, lo que es

Lo que soy

Lo que quiero

Por supuesto que esto es un ejercicio diario

Nace de la inmersión en colectivos en movimiento

Entonces veo que no estoy solo

Me siento fuerte y apoyado

La perspectiva me muestra una unidad de lo diverso

Me limpio de excesos y extrañamientos

Va quedando lo mío

Lo puro, que es compartido

Simplemente queda lo que hay, lo que está, lo que es

Un ejercicio tan sencillo

Unas palabras liberan

Anidan, envuelven, acogen, contienen.

Nace la luz en el intento.

El mundo de los libros

Es mi mundo preferido. Me he venido internando aquí bien desde chiquito. Cada vez más me reconozco como persona literaria y poética. El mundo de los libros.

Me alegra ver que alrededor mío hay gente que también vive así. Escriben y leen y sus vidas se cosen en páginas y palabras. Aquí la diversidad, el conocimiento, el aprendizaje colectivo que libera y renueva.

Mientras escribo vienen a mi memoria los primeros libros. Los primeros cuentos. Por ahí creo que no tengo amigos o tengo pocos amigos. Me hice amigo de mí mismo, sin embargo, y esto es una tarea en construcción.

Este acercarme a la persona que soy, con una actitud de cariño y afecto, con aceptación, viene siendo uno de los hechos más significativos de mi vida. El sentimiento de pertenecer a algo acogedor y amoroso viene siendo cada vez más el tono de mi existir. Me doy cuenta de que puedo confiar.

Puedo seguir adelante sabiendo que si pude llegar hasta aquí, puedo dar un paso más, o muchos más. Puedo pedir ayuda y la recibo y brindo. Así voy construyendo momentos de alegría que se suceden casi continuamente. Subidas y bajadas son inevitables. Pero predomina cada vez más una sensación placentera y de paz. Saber que no estoy solo tiene un papel primordial en esta hora.

Los libros me reúnen y me amplían. Son mi casa mayor. Anoto y escribo lo que escucho y veo, lo que voy aprendiendo, y así me uno cada vez más a la gente con quien convivo, y al tiempo que se hace así eterno. Lo que está fuera de mi alcance tiende a quedar en su lugar, invadiendo menos. Lo presente y actual se hace así de una intensidad y calidad sin igual.

Caminando

¿Hay algo más admirable, más sorprendente y tierno que la vida en todas sus formas?

Dejarnos tocar por esta maravilla creo que es todo lo que importa. No hacerlo es perder todo lo que tenemos, sin tener, ya que no podemos decir que tengamos la vida, sino que estamos vivos o vivas, si es que lo estamos, de hecho. Saber qué es esto me parece que es un intento constante, nunca terminado.

Lo que importa es vivir, y vivir con sentido. Darle sentido a la vida. Los caminos son muchos, lo que importa es insistir, no aflojar, dar un pasito más. En mi caso particular, lo que voy teniendo cada vez más, es un conocimiento de mi propia naturaleza. La persona que soy. Lo que fui haciendo de mí en esta ya larga jornada. Actualizando ese saber que se renueva a toda hora. Cada día es un desafío.

¿Cómo abrirme paso? ¿Cómo superar las barreras que la mente muchas veces crea, confundiendo, bloqueando? Miro hacia adentro y veo. Siento y me oriento. Entonces puedo caminar. Puedo seguir adelante.

Esperanzando

La luz del cielo. El canto de las aves. La alegría de un nuevo día.

Sigue la esperanza simple de otra vez tener una jornada que traerá nuevos aprendizajes. Esa maravilla de estar vivos. Respirando.

Queriendo hacer algo un poquito mejor, pero no por perfeccionismo, sino para ser más felices. Para disfrutar más plenamente de este milagro.

Una hoja del libro de la vida está aquí. Bajo mis pies. Dar una mano. Pedir ayuda. Hacer algo juntos, juntas. Sopla el viento, y con esto les dejo un saludo. ¡Buen día!

Ilustración: “Puntos de luz”

Placer, presencia y pertenecimiento

La consciencia es siempre consciencia de circunstancias dadas. Prestar atención a lo que sucede. Qué hago. Por qué estoy aquí. Qué sentido tiene estar vivo. Qué es lo que me alegra. Qué es lo que me hace bien. Recuperar y mantener la sensación y el sentimiento de pertenecimiento.

Saber que tengo derecho de disfrutar. Tener placer. Esta es una clave que para mí se viene haciendo cada vez más central. Salir de la semivida de la mera costumbre, el mero acto repetido, casi inconsciente o totalmente inconsciente.

La contemplación de la belleza es la puerta a la unidad sensible inmediata. Es posible si me acepto y en la medida que me acepto totalmente, radicalmente. Entonces fluye el placer. Dejo de ver a los demás como enemigos o amenazas.

Todos estos son descubrimientos cotidianos. Ejercicios que vengo realizando y de los cuales me voy haciendo cada vez más consciente. Así voy saliendo de prisiones tan duras y persistentes que por poco no acaban conmigo.

¡Si no hay placer, si no hay amor y confianza –y el amor es confianza– la vida puede llegar a sucumbir! Vuelvo a abrirme al mundo como antes. Una sensación familiar y nueva al mismo tiempo. Vuelve la vida.

Saber que proyecto sueños y los habito. Y vengo naciendo de mí mismo. Todo se hizo y se hace más evidente y concreto a partir de la convivencia. Saber que el amor de ella es confianza. Y que mi auto-aceptación se apoya y se refuerza en ese hecho esencial.

Escribir me ha ido haciendo cada vez más consciente de mi propia trayectoria vital. Hasta qué punto hoy puedo habitar un presente pleno. Realmente presente. Agradezco a las personas que me han ido dando retornos de este mi caminar.

Escribir no es para mí un medio, sino un fin.

Ilustración: “María”

Cosas que me alegran

Hay cosas que me alegran.

El barrio donde vivo, con sus ya muchos lugares guardados en la memoria.

Veredas por donde voy a distintos lugares

Árboles que ya guardo en mí

Sus raíces y su sombra

El dibujo de las palmeras sobre la arena

El mar, esa línea horizontal verde y celeste

Las personas que encuentro en los lugares que frecuento

Las memorias anteriores a este lugar

Que confluyen en este ahora.

Libros que leo y compongo

Dibujos y colores

Sentimientos de pertenecimiento

El aprendizaje contínuo del vivir

La fe que se enciende adentro mío, cosiendo mis días y mi ahora

La belleza que he sido capaz de encontrar

Esta larga caminata que no deja de sorprenderme

Y sobre todo el amor que me sostiene y contiene

Cosas que vivo hoy

Y que me ayudan a permanecer atento y abierto

Página a página

Hora tras hora

Maravillado y admirado

Agradecido por el bien que gozo

Y lo que sigo siendo capaz de generar.

Ilustración: “Letras y colores”