Presentificación

Hasta que pongo la primera letra a la hoja es como que casi una especie de ausencia. Ahora ya puedo respirar. Ya viene un poco de realidad. Otra vez me siento más entero. Tengo que hacer un ejercicio diario de presentificación.

Yo creo que esto le pasa a muchas personas. Hay que hacer un esfuerzo para estar aquí. Pude llegar a comprender las razones de esta situación. Traumas del pasado. Me toca coexistir con esta realidad. Incertezas. Miedo. Inseguridad.

Por suerte he ido generando recursos de enfrentamiento. La mirada interna. Los afectos que me reponen en un espacio de acogimiento y pertenecimiento. La creación artística donde voy generando sensaciones positivas.

El bien que veo que le provoca a algunas personas mi contacto, presencia y escritos. La fe y la oración, donde encuentro otra fuerte fuente de apoyo. En fin, esa insistente decisión de seguir adelante.

Deixe uma respostaCancelar resposta